CATEDRAL DE MÁLAGA

Capilla de San José

Su consideración como capilla es relativamente tardía, finales del siglo XVIII. Su primera advocación corresponde a la Virgen de las Angustias. El entonces obispo de Málaga, José Franquis Lasso de Castilla, natural de Granada, donó un cuadro de la citada dolorosa, patrona de su ciudad natal.

Fue a partir del siglo XX cuando la capilla se comenzaría a llamar de San José. Su nombre proviene del altar situado en uno de los testeros laterales. La talla de San José pertenece al escultor malagueño Fernando Ortiz. En ella se recogen las principales características del barroco andaluz con una gran muestra de influencias italianas. Un gran tríptico de la Anunciación, obra de César Arbassia, enmarca al titular de la capilla. En las hojas laterales se puede observar las escenas de la Visita de la Virgen a Santa Isabel y la Adoración de los Magos y por el reverso de las tablas aparecen las efigies de San Pedro y San Pablo.

Completan la principal riqueza artística de esta capilla una serie de cuadros sobre las alegorías de la Caridad, la Justicia y la Fortaleza y un Nacimiento del siglo XVI presentado en una urna de cristal a modo de escena evangélica.

“ Un gran tríptico de la Anunciación, obra de César Arbassia, enmarca al titular de la capilla. ”

Actualmente, en la capilla de San José se encuentra la puerta de salida del itinerario de la nueva visita cultural.

Capilla de San Rafael

La capilla está compuesta por un retablo de madera dorada y policromada con desarrollo de columnas y frontones partidos, todo distribuido en tres calles. En la calle central se encuentra la talla del titular de la capilla, San Rafael. Se trata de una obra anónima del siglo XVIII que sustituye a la imagen primitiva desaparecida en la Guerra Civil española, obra de Fernando Ortiz. En las hornacinas de las calles laterales se encuentran las imágenes de los dos Tobias respaldadas con arquitecturas fingidas.

“ Esta representación y el ático del retablo fueron las partes que se salvaron de la destrucción durante la guerra. ”

La parte superior del cuerpo del retablo está coronada por la alegoría de la Caridad. Esta representación y el ático del retablo fueron las partes que se salvaron de la destrucción durante la guerra. El resto del retablo fue reconstruido fielmente tras la contienda.

En la pared izquierda de la capilla observamos un cuadro de la Anunciación, obra del pintor madrileño Juan Niño de Guevara. Bajo dicha obra se emplaza el sepulcro de mármol del cardenal Herrera Oria, una de las figuras más destacadas del catolicismo del siglo XX.

Capilla de San Sebastián

Representaciones de San Sebastián a lo largo de la historia del arte lo han renombrado como el Apolo cristiano por ser uno de los santos más reproducidos.

“ renombrado como el Apolo cristiano por ser uno de los santos más reproducidos ”

Su imagen, atribuida al malagueño Jerónimo Gómez, preside un retablo neobarroco de grandes columnas corintias, de madera dorada y policromada, obra del escultor malagueño José Navas Parejo.

Junto a los pies del retablo, a su lado izquierdo, apreciamos una pequeña dolorosa de vestir del siglo XVIII tallada por Fernando Ortiz.

En la esquina de la capilla nos encontramos con la puerta de acceso a la torre Norte, lugar donde se encuentran dos importantes archivos: el del Cabildo y el Diocesano.

Cesta de compras